Mark Lazarus, director de equipo encargado de las coberturas deportivas de la cadena estadounidense NBC, responde a las críticas y afirma que se atenderá a las medidas anti-LGTB rusas si estas "son relevantes para el desarrollo de los Juegos".
Todos los países, incluido Rusia, "tienen cuestiones políticas y sociales", afirmó Lazarus durante una multitudinaria conferencia de prensa de la que se hacen eco numerosos medios. Cuando se le preguntó específicamente por las leyes contra la propaganda homosexual y otras medidas anti-LGTB, el periodista respondió que "si todavía están vigentes estas leyes e impactan sobre cualquier aspecto de los Juegos Olímpicos, lo contaremos".
La cadena NBC, la más antigua de Estados Unidos, ha recibido críticas por parte de quienes consideran que deberían aprovechar la cobertura de los próximos Juegos Olímpicos de invierno, que se inauguran el próximo febrero en la localidad rusa de Sochi, para denunciar las políticas del país respecto a la población LGTB.
El Comité Olímpico Internacional (COI) ha asegurado que, desde las más altas instancias gubernamentales rusas, les han asegurado que "la legislación [contra la propaganda homosexual] no afectará a aquellas personas que tomen parte en los Juegos, como espectadores o participantes."
Sin embargo, la organización de defensa de los derechos humanos de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales Human Rights Campaign (HRC) considera que tanto el COI como la cadena NBC deben denunciar estas leyes. "Deberían posicionarse y comprometerse con la seguridad de toda la población LGTB en Rusia, no simplemente la que acuda a los Juegos", afirma el presidente de HRC, Chad Griffin. "Acabar con estas nefastas leyes debería ser nuestro objetivo colectivo."
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