La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) ha puesto en marcha una campaña sin precedentes para concienciar sobre la igualdad de derechos del colectivo LGTB llamada "Libres e iguales".Navy Pillay, Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, anunció la puesta en marcha de esta campaña, que tendrá un año de duración, en una conferencia de prensa desde Ciudad del Cabo (Sudáfrica).
“La Declaración Universal de los Derechos Humanos prometió un mundo en el cual toda persona nace libre e igual en dignidad y derechos, sin excepción, sin que nadie sea dejado atrás. Sin embargo, esto sigue siendo una promesa vacía para millones de personas LGBT, obligadas a enfrentar a diario el odio, la intolerancia, la violencia y la discriminación. Cambiar actitudes nunca es fácil. Pero ha sido posible en relación con otros temas y, en este caso, está sucediendo ya en muchas partes del mundo. Se inicia con conversaciones a menudo difíciles. Es lo que queremos hacer con esta campaña. Libre e Igual inspirará millones de conversaciones entre las personas de todo el mundo y de todo espectro ideológico”, declaró Pillay.
La campaña fue precedida de un informe que la OACNUDH publicó en diciembre de 2011, primer documento oficial de las Naciones Unidas sobre la violencia y la discriminación contra las personas LGBT. El informe documentó los abusos generalizados contra los derechos humanos.
Actualmente, más de 76 países penalizan las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo, mientras que en varios más la discriminación contra las personas LGBT es generalizada, incluso en el lugar de trabajo, en los sectores de educación y de salud. En todas las regiones del mundo, se ha registrado la violencia motivada por el odio en contra de las personas LGBT, incluidos asaltos, violencias sexuales y asesinatos selectivos.
La campaña se centrará en la necesidad de impulsar reformas legales, así como en la importancia de la concienciación pública. En concreto, insta a los estados a investigar, procesar y castigar a los autores de crímenes de odio contra la comunidad LGTB y promulgar leyes que disuadan de cometer actos violentos por motivos de orientación sexual. También propone formar a policía, jueces y personal implicado en los procesos de detención para que sean sensibles a cuestiones relativas a las orientación sexual e identidad de género.
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